En Chile, como en el mundo, las enfermedades crónicas no transmisibles son un problema en aumento, tanto en
magnitud como en complejidad. Asimismo, Chile es un país que durante los últimos años ha visto aumentada su
población de personas mayores y, por consiguiente, los problemas de salud asociados a la demencia.
La demencia es una condición adquirida y crónica, caracterizada por un deterioro de diversas funciones
cerebrales, sin distinción de sexo y situación económica, que se acompaña de síntomas cognitivos,
psicológicos y cambios conductuales. Estos síntomas repercuten en la capacidad de las personas para llevar a
cabo sus actividades habituales, pudiendo requerir apoyo de terceros e incluso comprometer su autonomía y
participación familiar y social (Ministerio de Salud, 2017).
De acuerdo con la Encuesta de Dependencia, reportada por Fuentes y Albala en 2014, la prevalencia de
demencia en Chile alcanza un 7,1% en personas de 60 años y más (2.850.171, según CENSO 2017). Esto significa
que 199.511 personas de este grupo de edad podrían presentar esta patología. Las demencias están dentro del
grupo de enfermedades que causan mayor número de problemas, tanto para las personas que viven con esta
condición como también para sus familiares.
Conozca la Enfermedad
Son múltiples las enfermedades que pueden causar demencia. La enfermedad de Alzheimer, por ejemplo, es la
causa más común al estimarse que entre un 60 a 80% de los casos de personas con demencia corresponde a esta
condición; le siguen en frecuencia la demencia vascular (20 a 30%),
la demencia por Cuerpos de Lewy (5%) y la demencia frontotemporal (3% en personas de 65 años o más y de 10%
en personas menores de 65 años) (Alzheimer’s Association, 2022; Alzheimer’s Disease International, 2009).
Es importante entonces distinguir que, si bien aun no se cuenta con una cura para esta enfermedad, si puede
ser tratada con el objetivo de mantener o mejorar la calidad de vida de las personas que viven con demencia
y su entorno cercano.
Factores de riesgo
En estudios recientes se han identificado factores de riesgo para contraer demencia, algunos de ellos que no
se pueden modificar, por ejemplo la carga genética, edad, sexo, etc. Y otros, que si son modificables en el
transcurso de la vida y que explican entre un 30% y un 45% de la ocurrencia de demencia1 .
Entre ellos, se cuenta:
Pérdida de audición
Traumatismos
Encéfalo-craneanos
Tabaquismo
Obesidad
Hipertensión
Consumo de alcohol
Depresión
Aislamiento social
Sedentarismo
Diabetes
Exposición a la
contaminación del aire
⚠️ Controlar los factores de riesgo cardiovasculares y
enfermedades crónicas, corregir la pérdida auditiva (por
ejemplo mediante el uso de audífonos), controlar y/o tratar episodios depresivos y evitar el aislamiento social
o la soledad no voluntaria, ayudan a prevenir la aparición de demencia.
Preguntas Frecuentes
ℹ️ “Demencia Senil” es un término incorrecto y en desuso, al igual que hablar de
arterioesclerosis.
El adjetivo de senil se solía usar porque la mayoría de
las personas afectadas desarrollaba la enfermedad durante la vejez, entonces se veía a la
demencia como una consecuencia del envejecimiento. Sin embargo, aun cuando sea una patología más
frecuente en personas mayores, también puede aparecer en edades tempranas y, por otra parte,
existen millones de personas mayores que no presentan ni presentarán nunca una demencia a lo
largo de su vida. Hoy solo se habla de ‘demencia’ -sin apellido- y se define así a un grupo de
enfermedades que generan pérdida de habilidades cognitivas y trastornos de conducta, y que
llegan a interferir en la realización de las actividades de la vida diaria.
La forma más adecuada de referirse a una demencia es precisando a qué tipo pertenece: Enfermedad
de Alzheimer es la más común, pero también existe la demencia vascular, mixta (que reúne
características de las dos anteriores), demencia inespecífica, por cuerpo de Levy y asociada a
enfermedad de Parkinson, por mencionar las más frecuentes.
ℹ️ No es así. Relacionado con el mito anterior, a menudo se piensa que la demencia es una
consecuencia normal e ineludible del proceso de envejecimiento, sin embargo, hoy se sabe que no
es así, sino que el origen de las demencias puede ser variado. Algunas demencias son causadas
por la muerte anormal de neuronas en ciertas áreas del cerebro (por ejemplo, la Enfermedad de
Alzheimer), pero otras pueden ser ocasionadas por accidentes cerebro vasculares (ACV), infartos
o hemorragias (por ejemplo, la demencia vascular), o bien, por secuelas de traumatismos
cerebrales graves, por tumores cerebrales o incluso por infecciones como la encefalitis por
herpes u otras.
El mayor riesgo de ver la demencia como una consecuencia del envejecimiento, es llegar a creer
que nada se puede hacer al respecto y, por ende, subestimar la existencia o eficacia de
estrategias de tratamiento y apoyo. Por otra parte, esta falsa creencia solo ayuda a reforzar
aún más la imagen negativa y distorsionada de la vejez, de que con la edad es F
esperable tener problemas de memoria y comportamientos erráticos. Con el paso del tiempo, el
cerebro envejece y se producen cambios en el funcionamiento cognitivo (por ejemplo, procesar
información de forma más lenta u olvidar detalles), pero hay varias funciones que se mantienen o
que incluso pueden mejorar su rendimiento con una adecuada estimulación.
ℹ️ En la actualidad no existe ningún tratamiento que detenga o revierta la Enfermedad de
Alzheimer
(EA). Sin embargo, eso no significa que las personas no puedan acceder a terapias farmacológicas
y no farmacológicas que les permitan tener una mejor calidad de vida. Asimismo, un mejor
conocimiento y manejo pueden ayudar a sobrellevar los síntomas asociados como la depresión,
ansiedad y agitación. Las corporaciones de Alzheimer a menudo proporcionan asesoría y apoyo a
las personas con demencia y a sus cuidadores después de un diagnóstico. Hay demencias que son
secundarias a las enfermedades de base y, en ese caso, sí podría revertirse el problema. Por eso
es muy importante contar con un diagnóstico oportuno y temprano para determinar la causa
específica de la demencia.
ℹ️ Sí es posible. Prevenir significa disminuir el riesgo de presentar una
enfermedad. En el caso de las demencias, si bien todavía no es posible prevenir todos los
factores de riesgo dado que no se conocen todas sus causas, se sabe que existe una importante
asociación con los factores de riesgo cardiovascular: hipertensión arterial, obesidad, tabaco,
colesterol alto y falta de actividad física.
Un buen nivel educacional previo también se considera un eventual factor protector de la
demencia. Por lo tanto, implementar estrategias como el cuidado cardíaco, realizar actividad
física en forma regular, lleva una dieta saludable y realizar actividades de estimulación
cognitiva y que promuevan la socialización es esencial para sostener saludablemente a una
sociedad que continúa envejeciendo.
ℹ️ No toda falla de memoria es sinónimo de demencia y, particularmente, de Alzheimer. Existen
múltiples causas por las que puede fallar la memoria, e identificar la causa permite elegir el
tratamiento más adecuado (17). Hay enfermedades que pueden afectar los procesos de memoria (por
ejemplo,
depresión, estrés) o incluso el uso de ciertos medicamentos (por ejemplo,
antidepresivos, tranquilizantes, antiepilépticos, antipsicóticos), deficiencia de vitamina B12 o
incluso trastornos del sueño. Por lo tanto, hay fallas de memoria que, con un adecuado
diagnóstico, son reversibles.
ℹ️ La demencia severa con frecuencia causa complicaciones como inmovilidad, trastornos de la
deglución y desnutrición, factores que incrementan significativamente el riesgo de afecciones
agudas graves que pueden causar la muerte. En Chile constituye la 6ª causa específica de muerte.
ℹ️ El riesgo de las personas con familiares con Enfermedad de Alzheimer es levemente mayor al
resto
de la población. Solo el 10% de los casos es heredado, su inicio es precoz (antes de los 65
años) y el origen es una mutación cromosómica; el 90% restante es de tipo esporádico y se
desconoce su causa.
ℹ️ El cambio de paradigma en el abordaje de las demencias que busca avanzar cada vez más hacia
la
inclusión social trae como consecuencia, en la persona con demencia, la develación de los
derechos propios. Y en este sentido, de acuerdo con el Plan Nacional de Demencias, uno de los
principios esenciales a respetar es el de autonomía, que es la capacidad de tomar decisiones
sobre la propia vida, asumiendo la responsabilidad de éstas y respetando a los demás. Para las
personas que carecen de la capacidad de ejercer su autonomía, se tomarán medidas especiales para
proteger sus derechos e intereses. Otros principios rectores son la dignidad intrínseca,
igualdad, participación y solidaridad.
ℹ️ Mientras la investigación sigue avanzando en el campo biomédico de la demencia, el modelo
social
de abordaje se centra en la respuesta individual, familiar y social para mantener la calidad de
vida del paciente con demencia. Es una falsa creencia pensar que las personas con demencia no
tienen calidad de vida ni capacidad de disfrutar. Sin importar la enfermedad que se tenga, una
persona jamás pierde su condición de tal y, por ende, seguirá siendo inherente a ella su derecho
a la dignidad y todas las acciones relacionadas con su condición deben promover, proteger y
asegurar el goce pleno de sus derechos y libertades, de manera de seguir favoreciendo al máximo
su bienestar. El mayor peligro de esta falsa creencia es que se empiezan a desconocer y
descartar sus intereses y preferencias; la persona va perdiendo autonomía y condición de sujeto
de derecho.
ℹ️ Las personas con demencia como la Enfermedad de Alzheimer, experimentarán un proceso de
declinación gradual del conjunto de capacidades intelectuales y funcionales. Por lo tanto,
muchas personas con Alzheimer -con un adecuado tratamiento farmacológico y abordaje por parte de
cuidadores y/o de su entorno sociofamiliar- pueden vivir activas y seguir interactuando por
largo período.
Materiales Educativos
Videos educativos: Esta sección proporciona enlaces a videos educativos sobre el problema de salud:
🎞️ Hablemos de Salud:
Alzheimer: cuidados y prevención
🎞️ Abordaje Integral de Demencias:
¿Qué son las demencias?
🎞️ Cápsula informativa GES Alzheimer y otras demencias elaborada por el Servicio Salud
Talcahuano
🎞️ Campaña Día Internacional Alzheimer 2017
Hagámonos cargo de la demencia
Fonos de ayuda
☎️ Salud Responde 600 360 7777 – opción2
Información externa
“Caja de Herramientas: Viviendo con demencias” – Red Transdisciplinaria sobre envejecimiento U. de Chile
Este recurso infográfico breve provee información accesible y comprensible sobre la adaptación de viviendas para personas con demencias, con enfoque en accesibilidad y realidad social de Chile. Busca reducir la carga de cuidado y mejorar la seguridad y bienestar de las personas afectadas y sus cuidadores.
«Caja de herramientas: Estrategias para favorecer la alimentación y deglución de personas con demencia en etapas tempranas» – Red Transdisciplinaria sobre envejecimiento U. de Chile
En este recurso infográfico breve se abordan los desafíos de la alimentación en las etapas tempranas de la demencia, así como una serie de recomendaciones para apoyar, fomentar y mejorar la experiencia de la alimentación, con el fin de asegurar una actividad significativa, social y saludable. Estas orientaciones están dirigidas a cuidadora/es formales e informales de personas con demencia, así como a estudiantes o trabajadores de áreas afines a esta temática.
“Booklet. Mi libro de actividades” – Centro de Gerociencia, Salud Mental y Metabolismo (GERO)
Material educativo dirigido a niños en edad escolar. Contiene actividades coloreables y recortables que enseñan sobre los factores que mejoran el envejecimiento.
Libro: Personas Mayores y Demencia. Realidades y desafíos – Centro UC Estudios de Vejez y Envejecimiento
Libro elaborado por CEVE-UC y Fundación Oportunidad Mayor, reúne investigaciones y opiniones de expertos en envejecimiento y demencia.
Referencias
1 Livingston G., Huntley J., Sommerlad A., Ames D., Ballard C., Banerjee S., Brayne C., Burns A.,
Jiska Cohen-Mansfield J., Cooper C., Costafreda S., Dias A., Fox N., Gitlin L, Howard R., Kales H., Kivimäki
M., Larson E., Ogunniyi A., Orgeta V., Ritchie K., Rockwood K., Sampson E., Samus Q., Schneider L., Selbæk
G., Teri L., & Mukadam N., (2020) “Dementia prevention, intervention, and care: report of the Lancet
Commission” Obtenido desde: https://doi.org/10.1016/S0140-6736(20)30367-6
2Preguntas Frecuentes: Obtenido desde “Manual de Orientaciones para el Correcto Abordaje y Tratamiento
de
Noticias
Relativas a Salud Mental y Demencias. Para editores y periodistas de medios de comunicación” Ministerio de
Salud, 2018