La Dra. Paula Daza, Subsecretaria de Salud Pública lidera la instancia junto a cerca de 15 profesionales y expertos del MINSAL, Sociedades Científicas y Universidades.

El día martes 23 de octubre del presente año 2018, se realizó la primera reunión de conformación de la mesa de trabajo, con el propósito de entregar recomendaciones/claves para la prevención del ciberacoso entre niños, niñas y adolescentes, desde el ámbito de la salud física y mental.

Esta instancia, que cuenta con la participación profesionales y académicos expertos en salud mental y adolescencia de sociedades científicas como la SOCHIPE, y centros de investigación como la Universidad de Católica, Clínica de la Universidad de los Andes, Universidad del Desarrollo, Hospital Padre Hurtado, entre otras instituciones, deberá elaborar durante tres meses, claves y recomendaciones que se aplicaran tanto en colegios, familias y equipos de salud, para prevenir la ocurrencia de estas situaciones, como también para detectar a tiempo estos casos y darles una oportuna intervención. De esta forma, se espera impactar en otros problemas de salud derivados de este fenómeno tales como la depresión y el suicidio infanto-adolescente.

«Es importante considerar el nivel de aumento que ha tenido este fenómeno en los establecimientos de educación en los últimos años, especialmente en niños y niñas. La gravedad y alcance que tiene este problema se ha constituido en un problema de salud pública, y nosotros como Ministerio de Salud tenemos la misión de elaborar una propuesta integral y basada en evidencia de prevención y promoción, que sea factible de implementar en los colegios, familias y comunidades» señaló la Subsecretaria Daza.

Los estudios internacionales indican el acoso mediante redes sociales como un factor de riesgo para la salud integral, especialmente de la gente joven. A pesar de que en Chile existen pocos estudios basados en evidencia que den cuenta de este fenómeno, a través de esta mesa de trabajo se pretende obtener una visión más amplia del tema en nuestro país, considerando acciones basadas en evidencia, y desde esa plataforma generar, entre otras cosas, estrategias comunicacionales de prevención de la violencia ejercida entre niños, niñas y adolescentes a través de internet y los medios digitales, dando además una alerta sobre el riesgo para la salud biopsicosocial que este tipo de violencias provoca en la salud de este grupo de la población.